Si manejas todos estos puntos, estás de suerte, no necesitas una gestoría:

• Sabes comunicarte con una Administración cada vez más despersonalizada con certificados digitales y demás. Llamas por teléfono al ayuntamiento y no te contesta una máquina o te lo cogen a la primera.

En ese caso, no necesitas una gestoría.

• Llevas la contabilidad de tu negocio, poniendo en cada factura los tipos de IVA aplicables, que son 3.

Tampoco necesitas una gestoría si haces esto.

• Sabes, sin ningún género de duda, qué tipo de gastos te puedes desgravar para pagar los mínimos impuestos posibles, porque Hacienda somos (casi) todos.

La gestoría no te hace falta, así que mejor invierte ese dinero en tu negocio.

• Conoces todos los tramos del IRPF y cuándo es mejor crear una S.L. o montártelo por tu cuenta siendo autónomo.

No pintamos nada en tu negocio.

• Te vales por ti mismo para cambiar de nombre tu coche, pagar los impuestos correspondientes y enviar los documentos a la DGT.

Eso casi nadie sabe hacerlo, así que eres un privilegiado y puedes prescindir de acudir a una gestoría.

• Tienes mucho tiempo libre para, además de gestionar tu empresa, tratar con tus empleados (si los tienes) y atender a tus clientes, dedicarte a la parte jurídica y técnica de tu negocio como la seguridad social, las altas y bajas de trabajadores, a solicitar subvenciones, a contabilizar facturas, a sacarte tus impuestos y pasarlos por Hacienda para no encontrarte con un recargo o multa por presentarlo fuera de plazo, a pedir licencias al Ayuntamiento y a un largo, larguísimo etcétera.

Si puedes hacer todo eso, es muy probable que seas una gran empresa y tengas mucho dinero, además de un departamento específico. Pero si estás leyendo esto, lo más seguro es que no lo tengas o estés empezando en el mundo de los negocios.

Si aún no tienes un negocio pero pretendes tenerlo, esos 6 puntos son, a grandes rasgos, todo lo que vas a tener que gestionar si te lo montas por tu cuenta.

Serías Superman si pudieras hacerlo, pero, oye, que si lo eres, nos firmas un autógrafo, porque puedes prescindir de una gestoría.

Si en lugar de ser un superhéroe eres más bien una persona normal con un negocio normal que te supone un esfuerzo sobrehumano como para tener que gestionar también toda la parte más farragosa, difícil y aburrida, que es lo que hacemos, quizá te interese trabajar con nosotros.